Memoria
Todos tenemos un duende en el cerebro. Es
un duende que le llamamos Memoria. Al duende mío le puse Memory Duende. Como
los de ustedes, suele ser sabio, juguetón, reflexivo y también le gusta
fastidiar, a veces poco y a veces mucho.
Yo no sé si el de ustedes será como el
mío. Memory Duende me hace cada bromas que me irritan y si me enfado con él,
peor. Como por ejemplo el día que un amigo me
saludó efusivamente y yo no me acordaba quién era. Le dije: Por favor Memory, ayuda-me
y lo veía en mi mente rodeado de neuronas, riéndose como un loco. Disimulé lo
mejor que pude para que el amigo no se diera cuenta que no lo recordaba. En
varias ocasiones intercede para que se me olvide lo que voy a comprar y luego,
cuando estoy en la casa, el muy desgraciado, se ríe y me lo recuerda.
Pero el otro día quise burlarme de él. En
el cuarto de baño quedaba un solo rollo de papel sanitario. Varias veces fui a
comprar un paquete de doce rollos como hago siempre y Memory me hacía
olvidarlo. Viendo que se había terminado, cogí el tubo de cartón y lo puse en
el salpicadero frente al volante. Luego en el Mercado, lo llevaba en el bolsillo
de la camisa para sentirlo, Así pude comprar el paquete, ¡Había jodido a Memory
Duende!
Esa noche tuve necesidad de sentarme en la
tasa y me reía porque había fastidiado a Memory. Fui a limpiarme y… ¡Maldición!
El paquete se había quedado en el maletero del auto. Yo casi llorando veía a
Memory riendo a carcajada hasta enredarse con todos los circuitos de mi
cerebro.
pcfa