Cuando te vi
Aquellos
hermosos ojos negros, me enloquecieron.
Fue
esa locura inocente despertando los sentidos.
Te
conviertes en algo que nunca has sido
y
llueven los sueños que nunca existieron.
Ese
día, cuando te vi, surgir de la nada sonriendo,
alumbraste,
sin saberlo, mi camino a recorrer.
Porque
a partir de ese momento pensaba en poder
amarte
eternamente, mientras estuviera viviendo.
Cuando
te vi, llegó la magia, todo desapareció.
No había nada alrededor desviando mi atención
y
fuerte se escuchaban los latidos del corazón.
Yo,
en ese mundo creado, estábamos sólo, tú y yo.
Autor:
Pedro Celestino Fernandez Arregui