Desnudo
Desnudo, sí, quisiera salir desnudo a
la calle.
La
vestimenta que siempre he llevado la dejaría
para
dejar al descubierto la piel de la vida,
para que vean como es mi
persona sin el traje.
Comenzaré
por el traje, que oculta la realidad,
para
que la gente crea que no somos pobres
y lo que somos son cartas con distintos
sobres.
Luego la corbata que
estrangula la verdad.
Esa corbata de distintos
tamaños y colores
Con su nudo fuerte
alrededor del cuello
para diferenciarnos de la
mayoría del pueblo
y creernos importantes
con inexistentes valores.
Después me arrancaría la
camisa de un solo tirón.
La rompería en mil
pedazos y la tiraría muy lejos,
para que todos vean, niños,
jóvenes y viejos,
dónde, debajo de esa
camisa, está el corazón.
Me bajaría los pantalones
sin ningún rubor
para poder desenmascarar
al envidioso, al egoísta,
denunciar al ladrón, al dictador al falso
moralista
y perder la vergüenza
para criticar al traidor.
También me quitaría los
zapatos, no lo dudo,
para saber cuando piso
piedras o granizos,
para saber si es duro o
blando el suelo que piso
para ser como debo ser al
encontrarme desnudo.
Recorreré campos y de las
ciudades, las calles y avenidas
Mostrando a todo el mundo
como en realidad soy,
Observando los
escaparates de lo que me dan y doy
Hasta que encuentre la
ropa que muestre mi vida.
Pedro Celestino Fernández
Arregui